En este caso, que aún sigue abierto, la paciente se sometió a una intervención quirúrgica por atrofia mamaria bilateral con asimetría leve mediante un proceso de mamoplastia de aumento con prótesis “allegran”.

Al pasar un periodo de tiempo desde la intervención quirúrgica la paciente siente molestias, y un leve descenso en la mama izquierda. Decide realizarse una resonancia magnética y descubre que presenta una rotura de la prótesis.

Por tal efecto, se propone realizar una nueva intervención quirúrgica consistente en extraer la prótesis mamaria defectuosa, limpieza y estudio de la zona afectada, y, por último, la colocación de un nuevo implante.

Tras la segunda intervención, la paciente afectada decide demandar a la compañía ante el Juzgado de Primera Instancia de Sevilla alegando un incumplimiento de contrato debido a un producto defectuoso.